Bar Rte. Lubierre - Borau, Huesca

Jose F. A.

Atención un tanto gélida y hasta desagradable. Los clientes y la dueña te reciben como a los forrasteros en las películas del oeste: con gesto uraño y ademanes de no ser bienvenidos. El pueblo ok

Eduardo P. T.

No entren en este bar: no hay nada para comer y la dueña es una bruja antipática y amargada, además nos rayaron el coche por poner un poco de música (de Mozart) con las ventanas bajadas a las 12:00 del mediodía. Lo siento pero maldición para gente mala como esta.

Miguel C.

Longaniza ,casera buenisima.
Se puede encargar comidas avisando antes. Como olla jacetana y demás. Muy buenos.Atencion ,la puerta está en el lateral del lado del frontón.

Ojos P.

Casero, auténtico y tranquilo…

Un placer de experiencia comer en Borau …

Bernardo N. S.

No exageran otros comentarios desfavorables. La señora que atiende se debería dedicar a otro oficio porque la amabilidad y simpatía no es su característica principal salvo que seas cliente habitual que entonces sí se esmera algo más: comprobado. A nosotros sí nos tomó nota. No nos han atendido peor en ningún otro sitio y viajamos bastante. La comida muy floja. No lo recomiendo, mejor comer en otro establecimiento aunque en este caso sería en otro pueblo porque este restaurante creo que es el único de Borau.

Macarena D. B.

Fuimos 4 amigos a pasar el fin de semana del puente a Borau. Como era feriado, los primeros días estaba cerrado y no tuvimos la oportunidad de ir pero, por suerte, llegamos a desayunar el último día que estábamos hospedados en Borau. Digo "por suerte", porque hubiera sido una picardía perderse de estar en ese lugar, me animo a decir uno de los "imperdibles" de Borau y Jaca.

Aunque no estaban del todo preparados aún para atender a un grupo de 4 personas por la mañana, muy amablemente nos invitaron a entrar y nos atendieron. Desayunamos café con leche con sobada y no cualquier sobada: la mejor sobada de Pirineos y, tal vez, que he comido en toda España.

Cuando nos fuimos, uno del grupo se olvidó el anorak adentro y nos alcanzaron muy amablemente para decirnos que nos habíamos olvidado un abrigo adentro.

Una experiencia encantadora, recomendada para los que quieran vivir Borau y, sobre todo, probar las mejoras sobadas de España. En conclusión, uno de los highlights de los alrededores de Jaca y Pirineos.

Xavi C. C. A.

No pierdas el tiempo ni en parar. La vieja que atiende con monosílabos sólo dice NO. Paramos a las 13,45 h y preguntamos si se podía comer algo. Respuesta No. Y eso que estaba solo una mesa ocupada con gente del pueblo de cháchara y sin consumir. Y en la puerta pone bar Restaurante.

Pedro A. R. L.

Corroboro la opinión de Iván López,
REBOSAN SIMPATÍA :/
- Hola, buenos días. ¿Tendrían mesa para dos para comer?
- NO
Y aquí acaban tanto el diálogo como la posibilidad de ampliar opciones (raciones, bocadillos, etc)
Y eso que había 2 mesas libres de las 3 que tienen en el exterior.
Ha sido el diálogo más corto de nuestra historia gastronómica